Nuevas reglas del 4×1000

El Gravamen a los Movimientos Financieros (GMF), conocido como el 4×1000, ha sido un pilar del sistema tributario colombiano desde su introducción en 1999. Originalmente concebido como una medida temporal con una tarifa del 2×1000 para enfrentar una crisis financiera, este impuesto se consolidó como una herramienta permanente y fundamental para el presupuesto nacional. En 2024, generó aproximadamente $1,31 billones, demostrando su relevancia en el sostenimiento de las finanzas públicas.

Con los ajustes previstos para el 13 de diciembre de 2024, el Gobierno busca optimizar la aplicación de este impuesto, promoviendo la equidad tributaria y simplificando su gestión para los ciudadanos.

Eliminación de la Cuenta Exenta Única

Anteriormente, los contribuyentes podían designar una única cuenta bancaria como exenta del 4×1000, con un límite mensual de 350 Unidades de Valor Tributario (UVT). En 2024, una UVT equivale a $47.065, lo que establece un tope mensual exento de $16.472.750.

Con la implementación del artículo 65 de la Ley 2277 de 2022, esta restricción será eliminada. Desde su entrada en vigor, todas las cuentas de un mismo titular podrán beneficiarse de la exención, siempre que el total de las transacciones no supere el límite mensual permitido.

Ejemplo Comparativo

• Modelo Anterior: Una persona con tres cuentas cuyos movimientos fueran de $5 millones, $2 millones y $4 millones debía elegir solo una cuenta para la exención, incluso si el total combinado no excedía el límite permitido.
• Nuevo Modelo: Con el esquema actualizado, las tres cuentas estarán exentas si los movimientos combinados ($11 millones) no superan el límite de 350 UVT.

Este cambio no solo simplifica la aplicación del impuesto, sino que también promueve una mayor equidad al permitir una distribución más justa de los beneficios fiscales.

Ajustes en los Límites de Exención para 2025

Con la actualización anual de la UVT proyectada en $49.799, el límite mensual exento para 2025 aumentará a $17.429.650. Este ajuste permite a los usuarios manejar mayores montos sin incurrir en el gravamen, alineándose con las dinámicas inflacionarias y los incrementos en el costo de vida.

Las entidades supervisadas por la Superintendencia Financiera y la Superintendencia de Economía Solidaria tendrán un papel crucial en la implementación de estos cambios. Serán responsables de:

• Monitorear automáticamente los movimientos financieros de los usuarios.
• Garantizar que las exenciones se apliquen de manera precisa.

De este modo, los usuarios no necesitarán realizar trámites adicionales, aunque será fundamental que supervisen sus transacciones para verificar la correcta aplicación de los beneficios.

También puede leer: Saldo a Favor en la Declaración de Renta

Beneficios de los Cambios

• La eliminación de la cuenta exenta única reduce significativamente la carga burocrática para los ciudadanos.
• Al facilitar el acceso a exenciones múltiples, se incentiva el uso del sistema financiero formal, promoviendo la inclusión económica.
• Los usuarios podrán manejar múltiples cuentas sin preocuparse por superar límites restrictivos, siempre que respeten los topes establecidos.

Si bien estas reformas alivian la carga administrativa, también plantean desafíos operativos para las entidades financieras, que deberán actualizar sus sistemas para garantizar una implementación efectiva. Además, el debate sobre la sostenibilidad a largo plazo del 4×1000 como fuente de ingresos fiscales sigue vigente, dado su impacto en la economía formal.

Este impuesto, que comenzó como una medida transitoria, se ha convertido en una herramienta clave pero polémica dentro del sistema tributario. Su transformación refleja la necesidad de equilibrar el recaudo fiscal con la promoción de un entorno económico inclusivo y competitivo.